Dentro de la larga lista de cosas heredadas de la Dictadura que los políticos vendidos a los empresarios jamás sacaron, fue el absurdo de tener que pedir permiso para marchar. Una contrasentido que casi ningún otro país del mundo tiene, ya que en cualquier democracia se entiende que la protesta no puede ser coartada y dirigida por el poder, ya que al hacerlo se perdería todo el sentido de la misma.
Por esta razón, que la masiva marcha realizada hoy día de por los estudiantes, a pesar de que el ultraderechista Claudio Orrego no dio la autorización, es un importante avance logrado por los estudiantes a la hora de cambiar el relato establecido desde el poder. Mayor aún es el logro considerando la brutal criminalización que han sufrido desde los medios de comunicación masivos, y ni hablar de la constante represión de Carabineros, de los poderosos el protector, quienes están completamente desatados al punto de golpear a un camarógrafo por grabar la detención de un manifestante.
LOS ESTUDIANTES LLEVAN 10 AÑOS MARCHANDO POR LA EDUCACIÓN Y LOS POLÍTICOS SIGUEN SIN HACER NADA. HACE RATO QUE NO MERECEN RESPETO ALGUNO