Cuando la Derecha y los Grandes Empresarios hablan de quitar las cuarentenas, lo que de verdad están diciendo es que las personas pobres no importan y no tienen problemas en matarlos para no parar la economía. Porque mientras ellas pueden hacer cuarentenas felices en sus casas, son los pobres los que tienen que arriesgar su vida yendo a trabajar. El mejor ejemplo es que mientras Vitacura tiene una tasa de mortalidad por 100 mil habitantes de 38, en La Pintana es 106 y en Cerro Navia 121. Todo esto recordando, que ya han muerto 9.000 personas de Coronavirus. Una nota de The Clinic puntualiza
Las cifras expuestas en el último informe epidemiológico elaborado por el Ministerio de Salud dejaron de manifiesto las brutales diferencias socioeconómicas entre las comunas de altos y bajos ingresos, particularmente en la Región Metropolitana. Hay al menos tres datos presentes en el documento que demuestran que la pandemia del Covid-19 golpea más duramente a los sectores más pobres de la sociedad chilena: la tasa de incidencia, los casos activos y la tasa mortalidad.
La tasa de mortalidad se define como el número de muertes por Covid-19 por cada 100 mil habitantes. En Chile, este índice alcanza el 31.3 en promedio y la Región Metropolitana tiene prácticamente el doble: 64.0. De acuerdo al índice elaborado por el Ministerio de Desarrollo Social, las cuatro comunas que tienen menos prioridad social están por debajo del promedio: Vitacura (38.2), Las Condes (57.1), Providencia (53.2) y Lo Barnechea (36.3). Sin embargo, al recoger las cuatro comunas más vulnerables, el número se duplica y hasta triplica: La Pintana (106.2), Lo Espejo (107.8), Cerro Navia (121.4) y San Ramón (117.9).
