El caso del escopetazo por la espalda que sufrió Brandon Hernández Huentecol (17) a manos de Carabineros en un control de identidad, ha sido cualquier cosa menos un «accidente» como lo señaló la institución. De hecho, por algo un perito forense demostró que es imposible que «el arma se haya disparado sola» como argumentaron en un momento y por algo incluso han intentado comprar el silencio de la famila. Como muestra de esto, un artículo de Radio Villa Francia desglosó las 4 versiones diferentes que ha dado Carabineros sobre este claro intento de homicidio.
- La primera versión trataba sobre un operativo policial en la zona tras la supuesta denuncia de lugareños, de personas que estaban “lanzando piedras en el camino”. Esta versión, consignada por La Tercera como “fuente policial” e domingo en la tarde, señalaba que en una persecución policial sobre una camioneta con 6 personas en su interior, al darse a la fuga, carabineros disparó hiriendo al joven.
- La segunda versión, emanada desde la institución, versó sobre un “enfrentamiento” en medio de un procedimiento policial no detallado. Aquello fue consignado por Radio Cooperativa, quien luego borró la información.
- La tercera versión, dada por la institución, fue la de que el menor intentó resistirse y quitar el arma del funcionario policial, momento en que el arma se disparó.
- La cuarta, y hasta ahora última versión, fue señalada por el general de la IX Zona de Carabineros, Christian Franzani, quien apuntó a “un lamentable accidente”, señalando que el sargento segundo, tratando de arreglar la correa que sostenía su arma, esta “se habría disparado” provocando el lamentable accidente.
Todas estas versiones contrastan con la versión del hermano de Brandon, que se encontraba reducido en el suelo como él, y por testigos que vieron la escena, momento en que ambos menores se encontraban en el suelo, el carabinero (sargento segundo Cristian Rivera) mantenía su arma a poca distancia del cuerpo de Brandon y mientras les lenzaba garabatos, de un momento a otro, abrió fuego. Fue allí cuando sus compañeros (del contingente) reaccionaron y lo retiraron del lugar, tomando al menor y llevándolo de urgencia hasta Collipulli.
