Corroborando que la Reforma Laboral de Bachelet y la CUT fue creada para favorecer a los empresarios, (acá un claro video explicativo), trabajadores de Ripley se fueron a huelga, pero gracias al item de «servicios mínimos», de igual forma tendrán que seguir trabajando. Una nota de El Pulso detalla:
Se trata de un oficio respecto del Banco Ripley, empresa que presentó un requerimiento ante el organismo fiscalizador tras el rechazo del sindicato nacional de trabajadores de la firma frente a una propuesta de equipo de emergencia planteada el 14 de marzo. Hoy BancoEstado y Banco de Chile están también a la espera de zanjar los servicios mínimos, por lo que esto podría marcar un precedente.
El planteamiento original de Banco Ripley, ligado a la familia Calderón Volochinsky, consideraba la calificación como servicio mínimo de 51 cargos, los cuales serían ejercidos por un total de 400 trabajadores, solicitud que representaba un 49% de la dotación total de la compañía (820). En esa propuesta estaban incluidos los puestos de agente de sucursal, ejecutivo comercial, cajero y tesorero, coordinador de operaciones de sucursal, entre otros. Sin embargo, en su resolución de calificación, la DT sólo aprobó 25 cargos para la conformación de un equipo de emergencia de 139 trabajadores, desechando varias funciones por estar relacionadas con la productividad y el normal funcionamiento de la firma.
En el oficio se establece que para resolver la controversia se tomaron en cuenta informes técnicos de la Superintendencia de Bancos (SBIF) y el Banco Central (BC), que analizaron el caso de Banco Ripley y la implicancia de una huelga para el sistema financiero. La Dirección del Trabajo estableció que para la determinación de los servicios mínimos y equipo de emergencia se consideró que “la huelga es un derecho fundamental y su restricción debe ser lo estrictamente necesaria para la protección de bienes jurídicos que particularmente interesan al legislador y sin afectar su esencia”. También constan en el proceso administrativo alegaciones de las partes e informes de fiscalización.
1) El que siga diciendo que Bachelet y la Nueva Mayoría son «de izquierda» y que son diferentes a Chile Vamos debería ser agarrado a patadas
2) La CUT no puede pertecener ni a partidos políticos ni al Gobierno. Basta ver que con Bárbara Figueroa lo único que han hecho es cagar a los trabajadores
