El Gobierno derechista de Mauricio Macri, (que como buen delincuente especulador es amigo personal de Sebastián Piñera), logró aprobar en el parlamento la reforma previsional que no sólo reduce las pensiones de manera arbitraria, si no que además, eleva la edad de jubilación de los 65 a 70 años para los hombres y de los 60 a 63 para mujeres. Esta acción ha desencadenado fuertes protestas, cacerolazos y una huelga general de parte de los trabajadores.
Como informa El Desconcierto, la iniciativa ha provocado una férrea resistencia y despertó una serie de protestas en los barrios de la capital federal y en distintos puntos del país, que llevó a las y los argentinos a realizar diversas movilizaciones. La fuerte represión ejercida por la policía, cuyos videos evidenciaron episodios de violencia incluso en contra de adultos mayores, terminó con un saldo de 162 heridos, entre ellos, 88 policías y 61 detenidos.
Según detalla The Clinic, esta reforma, que no fue informada durante el periodo de campaña presidencial, es el proyecto más impopular y regresivo que lleva adelante Mauricio Macri. El filósofo argentino Federico Galende, explicó: “Macri jugó una carta fuerte porque el gobierno sabía que someter esta ley a votación en el Congreso iba a significar articular de manera involuntaria a la oposición. Pero estaban tan desesperados por achicar el Estado que lo hicieron igual. Ganaron con los votos de algunos peronistas, que se cambiaron la chaqueta, y que vienen de la década menemista, la época mas infame de la Argentina. La gente salió desde todos los lugares a protestar, estaban las Madres de Plaza de Mayo, las abuelas, sectores del kirchenrismo, del peronismo, gente de clase media, trabajadores, una conjunción que no es habitual, mucho menos en Buenos Aires”.
- Así son los Gobiernos de derecha en todo el mundo. A la primera crisis correrán a rescatar a los privados a costa del pueblo. ¿Se imaginan si esto pasaba en Venezuela? Estarían pidiendo la invasión de Estados Unidos
- Una de las cosas que tenemos que imitar del pueblo argentino es que si les suben un peso el pasaje son capaces de quemar la ciudad. Así es como se protesta, no con batucadas ni cuerpos pintados como los weones
