Si pensaban que Carabineros durante la pandemia iban a dejar de comportarse como una organización criminal que representa un peligro para la sociedad, pues les tenemos malas noticias: Y es que tras provocarle un aborto a una embarazada luego de molerla a golpes, hacer fiestas en las comisarías y Mario Rozas diciendo que “no sabe” quién le disparó a Gustavo Gatica, ahora resulta que con la pandemia de coronavirus desatada, gastaron 57 millones en comprar anillos de oro, sables de lujo y aritos de perla.
RELOJES DE ORO Y SABLES DE LUJO
El 3 de marzo fue diagnosticado por primera vez en suelo chileno un paciente positivo por coronavirus. Desde aquel entonces, las compras de insumos médicos relacionados a la protección y cuidado de funcionarios del Estado han aumentado drásticamente a través del sistema de compras públicas. Carabineros de Chile no ha sido la excepción, registrando múltiples compras de insumos médicos, kits para coronavirus, mascarillas y alcohol gel, además de compras rutinarias como abarrotes; artículos de aseo diario, arreglos y mantenciones a cuarteles y patrullas, pasajes de avión para funcionarios o servicio de fletes.
También se han adquirido -con caudales públicos- otros artículos que poca y nada relación tienen con el manejo de la crisis sanitaria que afecta al país o con el ejercicio del oficio: $4.500.000 destinados a la compra de cuatro anillos de oro conmemorativos; además de $31.840.000 desembolsados en 209 sables con una cabeza de cóndor en el mango y $5.894.000 para la adquisición de distintivos conmemorativos suman más de $42 millones de pesos ejecutados en artículos decorativos para personal policial.
La primera de las compras se da el 4 de marzo, cuando la llegada del virus a suelo nacional era un hecho y se advertía sobre los riesgos asociados al COVID—19. A través de tres órdenes de compra -una por 29.860.000, otra por 1.523.200 y una tercera por 456.960, Carabineros compró 209 sables con una cabeza de cóndor en el mango para un curso de aspirantes a oficiales de la Escuela de Carabineros. Los sables fueron adquiridos a la empresa Importadora San Juan SpA a $128 mil cada uno.
El 17 de marzo se completó la “adquisición de anillos de oro distintivos con el logo de la Escuela de Carabineros de Chile”, para lo cual se desembolsó un total de $4.5 millones. La institución realizó la compra de 4 de estas joyas a $785 mil pesos cada uno, cifra que pagó a la empresa Comercial A y V Limitada. Por último, el 26 del mismo mes, ya cuando Chile había declarado el estado de catástrofe y la fase 4 de la pandemia. Ese día, Carabineros efectuó la compra de una serie de distintivos conmemorativos por casi $6 millones. Los distintivos, que consistían en un “set de parches, barboquejos e insignias de salida para los alumnos de la Escuela de Formación de Carabineros”, fueron adquiridos a Peregrino SpA, empresa dedicada a la producción de distintivos
Exactamente a las 16:39 horas con 50 segundos del viernes 3 de abril de 2020, fue cuando la Comisión de Adquisiciones de Carabineros emitió la orden de compra por poco más de 15 millones de pesos para adquirir 326 pares de aros de “perlas cultivadas”. La compra estaba destinada a las funcionarias egresadas de la promoción 2019-2020 de la Escuela de Formación Policial (Esfocar). La adquisición se ejecutó en medio de la pandemia del Covid-19, cuando los elementos de seguridad sanitaria -mascarillas y guantes- son difíciles de comprar y en paralelo al oficio del Ministerio de Hacienda que ordenó redirigir recursos para enfrentar la difícil situación económica que ha generado la pandemia.
Los 326 pares de aros fueron adquiridos a Mario Pérez Pichipil, chileno, 56 años, cuyo giro de trabajo -de acuerdo a Dicom- es la “reparación de otros efectos personales y enseres domésticos”. Su correo de contacto -que consta en esa web de datos comerciales- corresponde a un pariente de Pérez Pichipil que labora en la Dirección de Aeronáutica Civil (DGAC). En la base del Servicio de Impuestos Internos (SII), sin embargo, aparece como vendedor “al por menor” de artículos de “joyería, bisutería y relojería”. En el historial del portal de Mercado Público del Estado, en tanto- Pérez Pichipil funge con cuatro ventas como proveedor reconocido por la institución uniformada
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Los pacos robando y gastando plata en plena pandemia… Por si tenían dudas de que Carabineros es una institución que debe morir, necesitamos una nueva policía profesional, desmilitarizada, que respete los DD.HH y lo más importante: SOMETIDA AL PODER CIVIL
