El sólo hecho de que tengamos una Constitución ilegal creada en Dictadura bastaría como argumento para cambiarla. Pero cuando vemos que durante 40 años sólo ha beneficiado a los grandes empresarios y que todos los proyectos que benefician al pueblo no se pueden aprobar por ser “inconstitucionales”, es cuando apreciamos la verdadera naturaleza de una Constitución que no puede continuar un día más, ya que fue diseñada para consagrar la Desigualdad Social entre ricos y pobres.