En una columna sobre el constante desprecio del Régimen de Piñera a la educación, el periodista Daniel Matamala sepultó la inmoral candidatura a constituyente de Marcela Cubillos, quien tras hacer campaña por el RECHAZO diciendo que la Nueva Constitución iba a salir muy cara, no sólo se está postulando a constituyente, más encima se “autodonó” 82 millones de pesos, dinero que lo más seguro sea una donación de los grandes empresarios. Parte de la columna señala:
Lo sucedió otra abogada, Marcela Cubillos, quien decidió convertir al ministerio en una trinchera. Se negó por semanas a conversar con el presidente del Colegio de Profesores, Mario Aguilar, mientras este lideraba un extenso paro, acusándolo, al estilo de Palacios y Moreira, de usar “excusas para no volver a trabajar”. Su gestión no mejoró la educación pública, pero sí pavimentó su futuro político como favorita de los poderes fácticos y del empresariado más ortodoxo. El 28 de febrero de 2020, mientras la tormenta del Covid se acercaba a los colegios chilenos, Cubillos abandonó el buque del ministerio, para liderar el Instituto Libertad y Desarrollo y la campaña del Rechazo a la nueva Constitución. Ahora, se postula a redactar esa misma Constitución, desplegando la campaña más millonaria del país, con un presupuesto de $84.800.000.