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En los antecedentes revelados por la Fiscalía durante la formalización del terrorista Héctor Llaitul, el líder de la CAM cuestiona en duros términos a Pablo Marchant, el joven muerto por Carabineros mientras realizaba un atentado, al que trató de “cagado de la cabeza” e incluso pensaba expulsarlo debido a su comportamiento. Una vez muerto, Llaitul aprovechó de utilizarlo como “mártir” para su causa. Un artículo de Ex Ante detalla:
El informe de la PDI contiene la transcripción de una conversación mantenida entre Llaitul y una mujer, identificada como Carolina Manqueo Solar, el 12 de abril de 2021, a las 10:08 pm. En el diálogo, Llaitul descargó su ira en contra de Pablo Marchant Gutiérrez, una figura que 3 meses más tarde reivindicaría como mártir, luego que el exestudiante de antropología de la U. de Concepción que dejó la facultad y se sumó a un brazo operativo de la CAM, muriera por un tiro policial el 9 de julio de 2021, cuando participaba de un atentado incendiario al fundo forestal Santa Ana de Carahue, que contaba con protección de Carabineros. Tenía 28 años.
Lo que comenzó como un reclamo por una fiesta en que dejaron su casa desordenada, terminó con descalificaciones y amenazas de expulsión. “Es un cagado de la cabeza, que cuando se cura se vuelve loco, ¿cachai? Y quiere pelear y siempre anda haciendo cuática”, dijo, consignó el reporte. “(Pero) entrégame la casa decentemente (…). Levántate del carrete, despierta, recoge la loza, huevón, no sé, los vasos, las huevadas quebradas, todo ordena pos huevón, no me entreguí la casa así”, continuó.
“Los cabros yo entiendo que se relajan y todo, trabajan, luchan y se quieren pegar su relajo, pero no sé… hay unos que se hacen así los cuchos, qué se yo, pero hay otros que realmente la hacen de (insulto)”. “No sé. No sé qué decir”, respondió la mujer a Llaitul. Luego preguntó: “¿Cuál es la cirugía?” “Yo creo que hay que cortar por lo sano, hay que expulsar al Toño. Nosotros… yo ya le di muchas oportunidades”. “Se reafirman unos con otros. Y al final se vuelve un desorden y un problema de seguridad, incluso”. “Yo creo que lo voy a expulsar. Cuando lo vea le voy a cantar la carta, si es que no lo masacro antes”.
Llaitul cambiaría el tono y opinión tras la muerte de Marchant. “Nosotros, incluso hoy día, sentimos a Pablo Marchant presente. Lo sentimos cercano, porque su püllü (espíritu) no está fuera de la lucha que desarrollamos. Él está en el wenumapu (cielo habitado por dioses), está en un transitar en el wenumapu y en el wenumapu específico, el lif wenumapu (cielo limpio), el lugar donde están nuestros fütakeche kuyfi llem, nuestros antepasados que guerrearon. (…) Ahí está Toño Marchant”, dijo en una entrevista al sitio en inglés Chile Today y al portal Werkén Noticias, difundida el 21 de julio.
