Uno sabe que la Izquierda está en el suelo cuando están desesperados buscando que Bachelet nuevamente sea candidata presidencial, sin darse cuenta que su campaña será la crónica de un desastre anunciado.
La vieja es lo más cercano a ser una piñata viviente ya que tiene TONELADAS de material para ser atacada: Todas sus reformas fueron un desastre, está llena de escándalos de corrupción, y más encima nos llenó de haitianos en un momento en que el 99% pide declararle la guerra a la migración ilegal.
La izquierda tiene que dar por perdida la elección y crear un nuevo proyecto acorde a la nueva realidad del país, que de verdad estén presionando a Bachelet para ser candidata cuando igual perderá, demuestra que lo único que les interesa es mantener sus peguitas en el Estado. Un artículo de Radio Bío Bío detalla:
Según la declaración de la exfuncionaria Tamara Vidal, el Gobierno Regional del Bío Bío entregó un trato preferente a la fundación de Michelle Bachelet. Se trata de un convenio por el que la institución recibió casi 380 millones de pesos para una iniciativa de la amiga de la ex Mandataria.
Entre los pagos con dineros fiscales se cuenta parte de su círculo de confianza y nuevos antecedentes —a los que accedió BBCL Investiga— revelan supuestas presiones a servidores públicos.
La declaración de una exfuncionaria del Gobierno Regional del Bío Bío, formalizada recientemente por fraude al fisco en el caso Polizzi, abrió nuevas sospechas respecto de los más de 379 millones de pesos que el organismo presidido por Rodrigo Díaz Wörner transfirió a la fundación de Michelle Bachelet, Horizonte Ciudadano.
Tal como reveló este medio en julio pasado, la institución pública entregó cuantiosos recursos fiscales —vía asignación directa— para un proyecto de Estela Ortiz, amiga personal de la ex Mandataria.
Y aunque el GORE alegó que estaba todo en regla, recientes antecedentes apuntan a un “trato preferente” en favor de la fundación creada en 2018.
Presiones para apurar los plazos vía correo electrónico, la entrega de los dineros sin pasar por todos los controles de rigor y pagos de remuneraciones al círculo cercano de la ex Presidenta se suman a una indagatoria que el Ministerio Público tramita sigilosamente.
