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Amigas y amigos, es momento de aceptar que estamos ante la peor generación de políticos de la historia. A ninguno le interesa construir un mejor país ni menos tiene planes estratégicos a largo plazo, lo único que les interesa es la ganancia chica del día para golpear a la contra de la manera más burda posible.
La ÚNICA manera de sacar un país adelante es haciendo leyes basadas en la evidencia, en el caso de la Ley Naín-Retamal, no existe experto alguno que no haya dicho que hay que hacerle modificaciones, ya que como está escrita presenta más problemas que soluciones. ¿Y qué hacen los imbéciles? Exigir que se apruebe tal como está y tratando de extremistas a los que piden un poco de racionalidad. Básicamente se están comportando como octubristas de Derecha.
En la izquierda no lo hacen mucho mejor, ya que en vez de criticar el proyecto de manera seria y con argumentos de peso, prefirieron quedarse en la consigna universitaria, y al llamarla “gatillo fácil” banalizaron el proyecto y gastaron la única bala de crítica que tenían. Tenemos una delincuencia desatada, lo que más apoyará la gente será que las policías sigan baleando delincuentes.
La pasada convención fracasó porque al ser mayoría sólo les interesaba pasarle máquina a la Derecha y aprobaron cosas en contra de la evidencia. La derecha, “supuestamente defensores de la sensatez”, están cometiendo exactamente el mismo error con la Ley Naín-Retamal. Si en 5 años la delincuencia está peor, estemos llenos de demandas por ejecuciones sumarias y los narcos tengan infiltrado a Carabineros, recuerden quiénes fueron los principales responsables.
